El uso más difundido de Skype ha sido como herramienta para realizar llamadas telefónicas gratuitas por internet. Así nació Skype. Sin embargo, progresivamente se fue perfeccionado y teniendo una significativa cantidad de usuarios. Poco a poco, se empezó a usarlo para otros fines y aplicaciones. Uno de los más destacados ha sido la videoconferencia. Gracias a Skype, un profesor, especialista o experto invitado puede presentar su exposición en audio y video sin importar en qué parte del mundo esté. La audiencia o grupo de expectadores también. La comunicación bidireccional se mantiene en todo momento. Sus beneficios son obvios. Así, pequeñas organizaciones educativas o laborales, incluso ubicadas remotamente o distantes pueden acceder a recursos importantes y actualizados.
Comentamos aquí rapidamente algunas consideraciones a tener en cuenta para obtener un mejor provecho de herramientas tipo Skype al emplearse como soporte para el aprendizaje. Un aspecto fundamental es que se trata de un "diálogo" entre las partes que tiene que ubicarse en un contexto educativo, formar parte de una experiencia de aprendizaje. A diferencia de tomar una conferencia en un video de YouTube, debemos hacer un cuidadoso planeamiento o preparación de la sesión con Skype para que no se limite a una exposición fría, unilateral, con escasa participación de los estudiantes o, al contrario, que no se convierta en una conversación informal sin objetivos de aprendizaje por alcanzar. Por lo tanto, son aspectos claves la motivación inicial, el focalizar o centrar la atención del expositor y de los estudiantes en asuntos críticos para el aprendizaje, y conservar o mantener estos niveles motivacionales adecuados durante la sesión. Sesenta minutos continuados observando a un expositor hablar... aburre a cualquiera! Recursos gráficos adicionales y complementarios son necesarios.
Aunque las distancias físicas tienden a "desaparecer" gracias a las facilidades tecnológicas de conexión por la red, no debe perderse de vista que las "distancias interpersonales" en la comunicación son igual de importantes. El conferencista o profesor deberá "adaptarse" a las características y estilos de aprendizaje de los estudiantes a la par que éstos aproximarse en lo posible a las características y perfil del expositor. Ello significa de modo simple que no se puede invitar al experto más destacado sin informarle adecuadamente de nuestros objetivos de aprendizaje, quiénes son los estudiantes, etc. a la vez que ellos tendrán una preparación previa a la conferencia sobre el contexto temático, su relación con los estudios que están siguiendo, el background del expositor, etc. No se trata de asistir al cine en una función de fin de semana.
La preparación y cuidado con los aspectos físicos y técnicos del soporte también es clave. Corresponde una verificación oportuna de las condiciones para la conexión, ambiente adecuado, uso correcto del software, prácticas y pruebas previas, etc. Muchos estudiantes son expertos en estos aspectos, pero no sucede lo mismo con los profesores. Una conveniente distribución de tareas y responsabilidades con la participación del profesor y sus estudiantes podrá contribuir al mejor uso de la tecnología como soporte para el aprendizaje. Aunque hemos mencionado a Skype, por tratarse de un servicio muy difundido, existen otras opciones como ooVoo, uStream, etc. que brindan similares facilidades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario